miércoles, 17 de abril de 2019

Todo por una tasa de porcelana

Así de sencillo, este objeto causo un gran problema:


En la mañana del día de hoy como acostumbro siempre, me preparaba y alistaba para otra nueva jornada de trabajo y facultad. Como suelo hacerlo cotidianamente, me preparaba un buen desayuno en lo que incluía café y algo para comer.

Todo marchaba normal, hasta que en un momento de la preparación, teniendo el café ya listo, me percate que la tasa que utilizo siempre no se encontraba donde la había dejado la ultima vez.

Dicha tasa, para mi, tiene un valor sentimental enorme, ya que fue un regalo de mi abuela pocas semanas antes de fallecer, y desde entonces, es un amuleto de la suerte que siempre utilizo para arrancar los días con el mejor animo posible.

Mientras mas pasaban los minutos, mas desesperación me agarraba por querer encontrar la famosa tasa, teniendo ademas poco tiempo por el hecho de tener que ir a trabajar.

Revise mi casa de arriba a abajo y no aparecía por ningún lado, llame a mi madre para saber si la había cambiando de lugar, a lo cual me respondió que no, desperté a mis hermanos para preguntarles si la habían utilizado y también me contestaron que no. Ya no sabia que hacer, estaba desesperado, muy malhumorado y con el animo por los suelos.

Tuve que salir a trabajar sin poder desayunar, lo cual me causo tener un día muy malo, viéndose claramente reflejado a la hora de tener que ejercer mi empleo. Sin embargo el día continuaba y tenia que intentar olvidarme del extraño momento que me toco vivir en la mañana.

Ya terminada mi dura y frustrante jornada de trabajo, me dirigí a la facultad para cursar la materia que tengo todos los miércoles, Periodismo Digital. La clase era muy buena y entretenida, hasta que por cosas del destino, el profesor nos propuso una actividad que justamente hacia hincapié en realizar un texto que vincule y trate sobre una tasa de porcelana. Era a libre elección, pero la actividad no fue para nada fácil, ya que requería muchísima creatividad, la cual ademas, había que trasladarla a un texto que se comprenda y se entienda.

Y por ese motivo, es que nació este relato que espero los haya entretenido y los haya sumergido en una historia sobre una pobre persona que deposito tanta fe en un objeto, que al fin y al cabo, llegó a manejar sus estados de animo a un nivel exponencial.

0 comentarios:

Publicar un comentario